Ser padres es un viaje que tiene muchas variaciones. Desde el embarazo, el nacimiento, el primer día de escuela y cada navidad, son muchos los momentos que atesoramos con nuestros hijos. Pero sin duda que cuando llegan a la adolescencia nos vemos de frente a una de las etapas más complejas de la paternidad. Crecimiento, cambios de humor y la definición de la personalidad, deberán ser guiadas por nuestras orientaciones. Y entre ellas, hablar de sexo con adolescentes puede contarse entre los retos más difíciles.

En una sociedad en la que tenemos cualquier tipo de información al alcance de un click, guiar a los adolescentes en el camino de una sexualidad sana y responsable puede convertirse en un desafío. Ya aquel cuento de la cigüeña es cosa del pasado. Desde muy chicos, los niños manejan información que encuentran en Internet, o que les es compartida por otros compañeros en la escuela.

Pero, más allá de eso, la guía amorosa, comprensiva y realista de los padres siempre tendrá un valor especial. Si tu hijo ya ha llegado o está por llegar a esos años críticos, revisa estos consejos que te ayudarán a que la experiencia de hablar de sexo con adolescentes, sea más sencilla y satisfactoria.

3 consejos para hablar de sexo con adolescentes

1. Aprovecha el momento

A veces, a la hora de hablar de sexo con adolescentes, la sobreexposición mediática puede jugarnos a favor. Cuando estés junto a tu hijo y aparezca el tema de la sexualidad, bien sea en un programa de radio, de televisión o en redes sociales, aprovéchalo como trampolín.

Sé tu quien abra la puerta para dialogar sobre ese tema, sin ponerle demasiada estructura ni formalismo a la conversación. Procura que tu adolescente nunca se sienta intimidado con tu tono, y más bien aprovecha momentos en los que puedan combinar la charla con otras acciones, como viajar en carro o cocinar.

2. Sé honesto y directo

Uno de los grandes errores que cometemos los padres a la hora de hablar de sexo con adolescentes, es plantarnos en una posición de sabelotodo, o adornar demasiado la información para hacerla menos directa. Si te sientes nervioso hablándole a tu hijo de estos temas, díselo. Eres un ser humano y no tiene nada negativo sentir ciertos temores.

Pero dile también lo importante que es hablar de sexualidad. No te limites ni adornes la información. Por el Internet y sus compañeros de escuela, seguro tu hijo ya conocerá mucho más de lo que crees. Háblale de manera directa sobre las diferentes prácticas sexuales, sobre los riesgos que implican y los métodos de los que puede disponer para cuidar su salud.

Recuerda no dejar por fuera el tema emocional que va de la mano con el inicio de la vida sexual. Transmítele a tu hijo que la responsabilidad sexual ha de ser también una responsabilidad afectiva. Y que, tal como debe prevenir embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual, también debe conducirse con responsabilidad emocional, tanto consigo mismo como con la persona con quien decida vincularse.

Fomenta el diálogo, incluso en los temas difíciles

Si te has puesto el objetivo de hablar de sexo con adolescentes, lo primero que debes saber es que no se trata de un monólogo. No funcionarás como una enciclopedia en la que tu hijo encontrará información desconocida. Al contrario, más bien habrás de ser la persona que, de manera amorosa y con confianza, le ayude a poner a prueba, a validar o a desechar lo que ya sabe, y a considerar otros elementos.

Abre la puerta del dialogo. Invita a tu hijo a hacer las preguntas que desee, pero especialmente prepárate para escucharlas y responderlas de forma empática. Puedes escuchar sus dudas sobre cómo saber si esta listo para iniciar su vida sexual, cómo hacer si pareja lo presiona, o incluso si tiene dudas sobre su orientación sexual.

Sobre este tema muchos padres no se sienten preparados. El hecho de que tu hijo te diga que cree que puede ser homosexual o bisexual, puede generarte dudas sobre el manejo de la situación. En estos casos, lo mejor es orientarlo diciendo que está viviendo un proceso de exploración de sí mismo y de su sexualidad. Y que cuando esa etapa pase, podrá definir con certeza cual es su orientación.

Lo importante es que refuerces en él o ella el hecho de que, independientemente de sus elecciones, cuenta con todo tu amor y apoyo. En definitiva, hablar de sexo con adolescentes no es más que acompañar con amor a nuestros hijos, en su transición a la adultez.